En los momentos en los cuales la situación de nuestra vida se altera y pasamos por una crisis en la cual se rompen todos nuestros pilares y nos encontramos confundidos, abatidos, desorientados y desanimados, ... Probablemente estemos pasando por una prueba de la abundancia.
La vida es un camino que emprendemos con un claro destino hacia la superación, descubriendo día a día las pistas que nos ayudan a dar uno y otro paso en la búsqueda de la satisfacción, y la riqueza, que es lo que nos reporta la abundancia.
Cuando se truncan los ideales positivos que nos mueven a crecer y superarnos, y nos invaden los sentimientos negativos, si los mismos se apoderan de nuestra mente, nuestra alma (nuestro yo interior) y nuestro espíritu (nuestro guía), rompemos con nuestro compromiso de la abundancia y damos paso a la pobreza en nuestras vidas.
Por eso, la abundancia nos sitúa en un contexto y nos hace sensibles para percibir lo malo para cambiarlo y corregirlo, para superarnos nuevamente y renovarnos, por eso, solo el optimismo abundante es el que nos ayudara a salir de esa situación.
Solo optimismo, solo visión positiva, solo abundancia en derroche para reorientar nuestra vida.
Y es por eso, por optimismo abundante, que hemos de dar gracias a la abundancia para que nos reconduzca hacia el camino de la riqueza de vida y la felicidad.
"El optimismo es el camino más corto hacia la felicidad. ¿Se nace optimista o se puede aprender a mirar la vida con ojos más venturosos?" (para saber más, consultar el siguiente link)
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