viernes, 7 de mayo de 2010

Published 14:31 by

La felicidad = orientación x satisfacción

 "La felicidad es la certeza de no sentirse perdido." (Jorge bucay)


De este modo, con esta cita, Bucay define que es la felicidad, pero personalmente me gustaría aportar algo más, desde mi punto de vista y experiencia personal, y compartirlo con todos a través de este blog.

Aparentemente puede considerarse una conceptualizacion no correcta de la felicidad, porque por norma la felicidad se vincula al verbo "ser" o "tener", en cuanto a un sentimiento de pertenencia, "ser feliz" o "tener felicidad", y en este caso Bucay nos hace referencia al "sentir", pero no nos habla de sentimientos y emociones, sino que nos habla de algo mas etereo que es el "no sentirse perdido".

Personalmente, hubiera definido que "la felicidad es la certeza de estar centrado", para ser mucho mas claro, o lo equivalente a no estar desorientado, desconcentrado, descolocado, divagante, ...

La vida en el transcurso de su marcha nos puede descolocar o descentrar, puntualmente, pero la afectación que pudiera hacer sobre nuestra felicidad seria puntual, pero en el caso de esta cita de Bucay, personalmente creo que subyace algo mas profundo, algo que sienten las personas que se encuentran en un estado depresivo o, en otro estado, con altas cotas de estres.

Tanto en la depresión, como en episodios de estres agudo, la desorientación vital, se traslada a episodios divagantes que derivan en una constante desconexión con la realidad, provocandose rupturas diversas entre la persona y su entorno, la persona y sus relaciones con terceros, la persona y sus objetivos vitales, y la persona y su conexión consigo mismo, ...

O sea, la persona rompe, pierde de vista, sus anclajes o los pilares que han sustentado su vida, derivandolos a una realidad paralela completamente pesimista y destructiva, que rompe con la felicidad, y con los sentimientos positivos de "ser" o "tener" felicidad.

La perdida de posesión de la felicidad y la falta de control sobre los actos de uno mismo, encontrandose impotente ante el dominio del entorno, de los problemas, de las personas, es lo que provoca ese sentimiento de "estar perdido" que nos indica Bucay.

Por eso lo importante ante una situación de este tipo es ayudar a la persona a "resetearse", o sea, a trazar de nuevo sus objetivos de vida y establecer un plan de trabajo, donde el cuando y el como son decisivos, influyendo mucho mas el cuando, porque si no hay hitos visibles de la consecución de esas metas, el tiempo se vuelve un cronografo devorador de felicidad.

Las metas y logros deben trasladarse en el calendario y deben de evidenciarse los avances, porque de otro modo, sin esas evidencias, sera muy difícil motivar el instinto de superación.

Por tanto, en el plan de trabajo hay que establecer cambiar "cosas", mejorar nuestro FENG SHUI y determinar pequeñas metas al principio (cosas fáciles), porque de este modo se generarán pequeños estímulos positivos que provocarán un efecto motivador.


Ver más sobre feng-shui.

La interpretación que he encontrado en el blog de MARU CANALES (ver link anterior) me ha parecido interesante y complementaria en esta "búsqueda de la felicidad", puesto que orientar nuestro entorno para favorecer que las energías fluyan es uno de los aspectos principales para retomar nuestro control personal, ... y ser felices.

También es importante la influencia de un tercero, concretamente, el "dejarse ayudar", preferiblemente por alguien que pueda aportar con autoridad la proyección de ese plan de ataque para volver "a estar centrado para ser feliz" con el objetivo que ayude a confrontar nuestras acciones y ayude a evaluar los logros y a discernir las acciones a emprender, y, sobre todo, reforzar nuestra auto-estima.

En cuanto a esta presencia de un tercero, no quiero refererirme propiamente a ayuda terapéutica, puesto que si no se puede disponer de un psicólogo, también podría ayudar la figura de un buen prescriptor profesional, un colega próximo, o una buena amistad (con la cabeza centrada).

Y, no menos importante, hay que hacer una cura de reconocimiento de los "errores" porque si no trabajamos en la aceptación de los hechos errados, continuamente repetiremos una rutina negativa de errores que nos conduciran de nuevo a ser infelices.

En este caso, la negación del error, es un distorsionador personal fomentado por el orgullo personal que nos impide avanzar.

Equivocarse o errar es lo que nos hace humanos, y reconocer esos errores es lo que nos hace superarnos y crecer aunque duela saber que estábamos equivocados, y, ayudarse a cambiar es lo que realmente nos retornara la felicidad.

Estas heridas de felicidad, son bajones animicos, pero la vida nos reporta vitaminas que hemos de saber aprovechar para curarnos, el ocio, la música, el cine, el descanso, el sol, el mar, ... la soledad, la reflexión, la intimidad con uno mismo, ... la percepción activa para estar atentos a encontrar nuevos modos de ser feliz y la confianza en nosotros mismos porque seguro que con anterioridad ya hemos superado situaciones similares (o incluso peores).

Pero quizás, como mas importante y a modo de conclusión, es que la felicidad es una percepción individual que subyace en nuestro interior, por tanto, es importante hacerla crecer desde dentro.

Esa es una de las enseñanzas que podemos aprender de la película "en busca de la felicidad".

Ver video en YOUTUBE de la película


El argumento de esta película es un gran incentivo para superarnos. Su actor principal, Will Smith nos muestra el gran amor de un padre hacia con su hijo, el cual pesar de sus preocupaciones (que realmente son muchas y nos las muestra "sin disfrazar"), continúa cumpliendo sus obligaciones como padre, mostrando todo su cariño y  comprensión, utilizando ese afecto como incentivo para superar los obstáculos a los que se enfrenta; tomando sólo las cosas buenas de la vida y luchando por conseguir los sueños que justifican toda su lucha, recordándonos que el fracaso no es producto de una caida, sino que el fracaso es producto de que no intentemos levantarnos.

Ante la vida, caben 3 actitudes posibles, la huida (para no enfrentarnos a los problemas), la parálisis (esperando a que los problemas se arreglen solos, ... o se compliquen mucho más) y la lucha (tomando una actitud combativa, actuando y actuar y trabajando con esfuerzo por lo que soñamos y en lo que creemos).

Por eso, para mi, tomando la cita de Jorge Bucay, que es lo que me ha hecho aportar esta felicidad, reescribiria la cita, motivando a todos en la búsqueda de "una nueva felicidad", aunque sea doloroso romper con pilares que hemos construido pensando que eran los anclajes perfectos para "sentirnos centrados", y empezaría por una reflexión sobre si somos felices y aquello que no nos hace ser felices, y para ser efectivos y eficaces lo plasmaria por escrito como fruto de nuestra racionalización para poder reflexionarlo a posteriori y marcar nuestro "plan para volver a ser felices".

Y reescribiria la felicidad de la siguiente manera:

"La felicidad es la certeza de sentirse centrado en la consecución de los objetivos vitales, definidos realistamente (en tiempo y forma), y en la conexión de satisfacción con uno mismo."

Solo una cosa mas, sea como sea, intenta "ser feliz" y no dejes que los demás, o las circunstancias, se apoderen de esa magnífica sensación de "libertad y desarrollo" para poder disfrutar de la vida.

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